Cuando la Rocco pierde los papeles, como en la anterior jornada, y vuelve al arenoso cepillo sintético de la laboral, suele dedicarse a descabalgar a algún candidato al ascenso, y es que somos así, como Robin Hood, robando a los ricos... para regalarlo a los pobres.
El retorno al redil del marinero Alberto, mirada sombría y lleno de conocimientos misteriosos traídos del distante oriente, era un buen presagio, codo con codo Alex, Toni, Carlos, Tron, Pippers, Diego, Ángel, Saul, Popper, Dubra, Juan V, Michi, Juan B. y Pris. A los mandos del reactor el mister Jordi.
La primera parte empezó aburrida, lenta y tranquila, si se dijo que eran rápidos, lo cierto es que los del Rafagas se quedaron en una brisa bastante incapaz de erosionar a la Rocco, los minutos discurrían a un ritmo geriátrico, y los granates se dejaron llevar mientras calentaban motores.
A mitad de la primera parte se percibió algún movimiento, los del Ráfagas parecieron espabilarse por unos instantes pero tras los segadores de la linea defensiva roccense, no había un portero ni piadoso ni misericorde. Un tiro a bocajarro a la cruceta derecha es despejado con unos reflejos endiablados por Alex. Y ahí terminará todo el bagaje ofensivo de los contrarios.
A cambio, llega el gol de los nuestros. Un penalty sobre Tron, que nos resarce de los desmanes arbitrales pasados, permite a Alberto reclamar su puesto en la manada. Frío y efectivo como un robot bate al portero contrario.
Los minutos transcurren y llega el segundo tiempo, un doble relevo ofensivo es la propuesta del mister, entran Michi, Juan V., también Pris y Juan B. mientras Tron se queda en punta como delantero nato. Los minutos pasan y la presión aumenta. Tron aprovecha la confusión en el campo contrario y ejecuta el segundo tanto. Tiros de Michi al borde del gol, entradas en el area de Pris, Tron, Juan V se suceden.
La cosa empieza a adquirir un cariz muy poco esperanzador para los del Ráfagas, y ellos lo saben, se quejan, se pelean, nada va a cambiar, pero, adelantan demasiado la defensa. Un balón cae a los pies de Juan V. lanza un pase sobre la linea defensiva y Jorge corre solitario hacia su segundo gol, batiendo al portero por bajo, culminando la victoria Roccense. No mucho despues, es expulsado por doble tarjeta amarilla, pero el resultado ya no cambiará. Poco después el silbato del colegiado lo confirma.
Pues si, en un solo partido hemos, casi, duplicado los goles que teníamos (Tron y Ángel comparten el pichichi y recuperado el Zamora. Que todo siga igual.
Proximo partido: DESCONOCIDO
El retorno al redil del marinero Alberto, mirada sombría y lleno de conocimientos misteriosos traídos del distante oriente, era un buen presagio, codo con codo Alex, Toni, Carlos, Tron, Pippers, Diego, Ángel, Saul, Popper, Dubra, Juan V, Michi, Juan B. y Pris. A los mandos del reactor el mister Jordi.
La primera parte empezó aburrida, lenta y tranquila, si se dijo que eran rápidos, lo cierto es que los del Rafagas se quedaron en una brisa bastante incapaz de erosionar a la Rocco, los minutos discurrían a un ritmo geriátrico, y los granates se dejaron llevar mientras calentaban motores.
A mitad de la primera parte se percibió algún movimiento, los del Ráfagas parecieron espabilarse por unos instantes pero tras los segadores de la linea defensiva roccense, no había un portero ni piadoso ni misericorde. Un tiro a bocajarro a la cruceta derecha es despejado con unos reflejos endiablados por Alex. Y ahí terminará todo el bagaje ofensivo de los contrarios.
A cambio, llega el gol de los nuestros. Un penalty sobre Tron, que nos resarce de los desmanes arbitrales pasados, permite a Alberto reclamar su puesto en la manada. Frío y efectivo como un robot bate al portero contrario.
Los minutos transcurren y llega el segundo tiempo, un doble relevo ofensivo es la propuesta del mister, entran Michi, Juan V., también Pris y Juan B. mientras Tron se queda en punta como delantero nato. Los minutos pasan y la presión aumenta. Tron aprovecha la confusión en el campo contrario y ejecuta el segundo tanto. Tiros de Michi al borde del gol, entradas en el area de Pris, Tron, Juan V se suceden.
La cosa empieza a adquirir un cariz muy poco esperanzador para los del Ráfagas, y ellos lo saben, se quejan, se pelean, nada va a cambiar, pero, adelantan demasiado la defensa. Un balón cae a los pies de Juan V. lanza un pase sobre la linea defensiva y Jorge corre solitario hacia su segundo gol, batiendo al portero por bajo, culminando la victoria Roccense. No mucho despues, es expulsado por doble tarjeta amarilla, pero el resultado ya no cambiará. Poco después el silbato del colegiado lo confirma.
Pues si, en un solo partido hemos, casi, duplicado los goles que teníamos (Tron y Ángel comparten el pichichi y recuperado el Zamora. Que todo siga igual.
Proximo partido: DESCONOCIDO